La famosa celebración de Halloween, de origen celta, nace en Irlanda aunque su máximo exponente sea Estados Unidos. Niños que piden dulces, truco o trato, calabazas, brujas, casas encantadas, fiestas de disfraces, fantasmas y un ambiente oscuro se vive principalmente en estos lugares de Estados Unidos.
La famosa ciudad de Massachusetts es el escaparate perfecto para los adictos al terror. Lugar donde en 1692 tuvo lugar el juicio de la Caza de Brujas, aún conserva la casa del Juez Corwin, convertida en un museo donde pueden desentrañarse los misterios de tan oscuro período. De las muchas atracciones, puedes ir de noche a escuchar cuentos ambientados al Poblado del Río donde se dicen vivían las brujas, tambien asistir al Festival de la Muerte donde se exhiben ritos de vodoo y magia o el Salem Open Market, donde podrás prepararte con todos los artilugios para celebrar las fiestas.
La ciudad de las luces no podía dejar escapar su oportunidad de celebrar Halloween con todo su estilo. Las discotecas celebran las fiestas más sangrientas y los hoteles adquieren la condición de lugares malditos. La Cúpula del Miedo está considerada una de las mejores casas encantadas de Estados Unidos, un recorrido artificial por los restos más fantasmagóricos del Titanic en el Hotel Luxor o las clásicas leyendas de gangsters fallecidos en hoteles como el Flamingo. Para hacer un alto nada mejor que dejarse caer por el She By Morton’s Bar donde se juega al Truco o Traco mientras devoran dulce de leche o zumos tropicales con sirope de “sangre”. La mayor locura de Halloween.
Esta ciudad fue la primera en celebrar el desfile de Halloween en 1920, expandiendo la tradición al resto de estados. Hay pasatiempos de carácter más familiar, como la famosa Miss Anoka Beauty Pageant, parada que incluye talleres de calabazas y concursos de disfraces, sin embargo otras muchas están enfocadas a personas mayores de 13 años, desplegando un arsenal de casas encantadas (como el Pope County Fright Nights o la Tienda del Gore, donde se recomienda que los niños entren acompañados).
Otras atracciones más retorcidas se establecen a modo de feria en las afueras, como el Scream Town, donde puedes resistir en el interior de una planta nuclear atestada de gas (Sector 666) o el Circus Asylum, donde macabros payasos acechan desde las jaulas y los muertos toman cervezas en los bares.
El sur de los Estados Unidos, tierra de ciénagas, vudú y magia, tiene en Nueva Orleans su mejor representante, pues ofrece una celebración de Halloween para todos los gustos. Desde la fiesta original celebrada en 1983 en el Civic Theatre hasta la visita de lugares encantados como el hospital The Provincial o una noche de discoteca con espectáculos de terror a medianoche en medio de la pista.
Como atracciones típicas anuales encontramos The Mortuary o House of Shock, dos casas encantadas de varios pisos no apta para menores, mientras que los más tranquilos pueden apuntarse a alguno de los tours de Galavant Ghostly para conocer los lugares y curiosidades de las grandes figuras del vodoo en el Barrio Francés de Louisiana.
La fiesta del Día de los Muertos mexicana adquiere una dimensión más colorida y filosófica. Celebración estrella de las comunidades mexicanas de Estados Unidos e influencia del Halloween americano, también podemos optar por esta visión del terror acercándonos a ciudades como NuevaYork o San Francisco.
Ésta última ofrece exposiciones de arte en el SOMart Museum mientras que en el distrito La Misión encontrareis muestras de altares decorados, esqueletos de colores, galerías, talleres y concursos callejeros. Para vivir un Día de los Muertos más auténtico nada mejor que visitar ciudades como Santa Fe o El Paso, de gran tradición mexicana y que acontece principalmente el 2 de Noviembre.
4. Parques temáticos
Para cerrar no olvidemos los parques temáticos del país, ya que Disney, Estudios Universal, Legoland, entre otros preparan también a sus personajes para vivir la temporada de espantos.
Celebrar Halloween en Estados Unidos es una de las atracciones turísticas más curiosas del mundo, no apta para sensibles, aunque los destinos ofrezcan todo tipo de instalaciones para comprobar el miedo desde un museo, una casa encantada, fiestas salvajes o un atracón de dulces. Sólo queda elegir la ciudad adecuada.
Fuente: VIX
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